jueves, 17 de septiembre de 2009

Y si vivimos, para El vivimos!

No importa en que momento llegue, pero la muerte siempre nos sorprende; Nadie esta preparado para enfrentar la separación de un ser querido; Aún cuando confiamos en la promesa que nos deja el apostol Pablo en Filipenses 1:21 " Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia"
El dolor por la separación fisica nos golpea fuertemente y es allí donde solo Dios a través del Espíritu Santo puede confortar nuestros corazones.


Nosotros los que vivimos, Vivamos para El: "Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así pues, sea que vivamos, o que muramos, del Señor somos" (Rom 14:8)

Vivamos a plenitud, aprovechemos bien el tiempo, Recordando que la vida se nos dió para cumplir un propósito Divino:"Según nos escogió en Él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de Él" Efesios 1:4

Mientras caminemos por esta vida esforcémonos por ser cómo Él, luchemos continuamente y sin tregua contra los apetitos de la carne, haciendo morir lo terrenal en nosotros y así cuando la muerte nos llegue, poder decir "He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. 8 Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida" 2 Tiimoteo 4:7-8